El prejuicio es invisible para el sujeto. A veces, oscuro, como los agujeros negros del universo, y otras, transparente, imposible de ver de puro obvio y pegado a lo cotidiano. En cualquier caso, sólo aparece como tal, cuando es iluminado por la mirada del “otro diferente”. Por tanto, es un hecho de naturaleza esencialmente interpersonal.
En la clínica, también los prejuicios del terapeuta resultan invisibles hasta que no topan contra la “otredad” del paciente, y nos conducen a callejones sin salida. Para resolverlos, se propone un uso winnicottiano y relacional: comunicarlos y compartirlos con el paciente, y, destruirlos, en su carácter omnipotente de sentencias incuestionables, para que así puedan ser usados, tan sólo, en aquellos contextos en donde resulten adecuados. Esto se ejemplifica en dos casos clínicos y en una viñeta.
En la teoría, se recupera la tensión esencial entre el “saber y no saber” del método socrático, el principio de “falibilidad” defendido por los filósofos pragmáticos americanos –que concebían el valor de las ideas por su capacidad de ser revisables y adaptables a nuevos contextos- y la filosofía hermenéutica de Gadamer. Estas bases se aplican a la reformulación del nuevo concepto teórico de la terceridad. Por último, se amplía el contexto de análisis. Se aboga por una profundización del ideal democrático en nuestras instituciones psicoanalíticas, en contra de los restos del “prejuicio aristocrático” que generan relaciones de idealización, e inhiben el desarrollo de la creatividad, por ejemplo, mediante el abuso del recurso a argumentos de autoridad, en vez del uso de una lógica de consensos razonados.
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Palabras clave: prejuicio, uso del objeto, terceridad, dualidad complementaria, dualidad democrática, ideal democrático, falibilidad.
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Prejudice is invisible to the subject. Sometimes, dark, like the black holes of the universe, and other times, transparent, impossible to see for being so purely obvious and linked to daily life. In any case, it only appears like that when it is illuminated by the look of the “other different”. Therefore, it is a fact of essentially interpersonal nature.
In the clinic, the prejudices of the therapist also turn out to be invisible until they come up against the “otherness” of the patient, and they lead us to a dead end. In order to solve them, a winnicottian and relational use is proposed: to communicate them and share them with the patient, and, destroy them, in their omnipotent character of unquestionable sentences, so that in that way they can be used, only, in those contexts where they turn out to be adecuate. This is exemplified in two case studies and in a vignette.
In theory, the essential tension between the “to know and not to know” of the socratic method is recuperated, the beginning of “fallibility” defended by the pragmatic Americans – who understood the value of ideas for their capacity of being revisable and adaptable to new contexts- and the hermeneutic philosophy of Gadamer. These bases are applied to the reformulation of the new theoretical concept of thirdness. Finally, the context of analysis is widened. An in depth study of the democratic ideal in our psychanalytical institutions is advocated, against the remains of the “aristocratic prejudice” which generates relationships of idealization, and inhibits the development of creativity, for example, by means of the abuse of resorting to arguments of authority, instead of using a logic of reasoned out consensus.
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Key words: Prejudice, use of the object, thirdness, complementary duality, democratic duality, democratic ideal, fallibility.
English Title: Using the Therapist´s prejudices. Democratic method in psychotherapy.
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Cita bibliográfica / Reference citation:
Pinto, J.M. (2007). El uso de los prejuicios del terapeuta: método democrático en psicoterapia. Clínica e Investigación Relacional, 1 (1): 150-164. [http://www.psicoterapiarelacional.es/CeIRREVISTAOnline/Volumen11Junio2007/CeIR_V1N1_2007_9JM_Pinto/tabid/267/ Default.aspx ]
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